Las cruces de mayo

Me he levantado muy agradecida de no tenerte en mi vida. Se que he sido un poco mal educada por no darte las gracias de tantas cruces que me has ido poniendo con el tiempo. No te preocupes, no me importan los motivos que tengas o hayas tenido.

Supongo que si todo lo achacas al "affaire" con la mujer que tu marcaste antes, haces divinamente. Me resulta curioso que, con ella, tu relación se mantenga intacta. Sí, cómo si no hubiese ocurrido nada pero sin rencores, querida amiga.

Me alegra saber que cuándo la miras a la cara, alguna vez debes recordarme y eso me hace muy feliz. Discúlpame si no soy de ir "meando" a las personas. Nadie pertenece a nadie.

Por todo ello, creo que es momento de pensar en cuántas "fichas" te han tirado -si eran ciertas- y terminaron en la cama de la habitación del al lado. Algunas se perdonan y otras no. A mí me tocó la china pero mejor así.

Pese a todo y con la educación y el respeto como principio fundamental, he decidido darte las gracias a mi manera por cada una de las crucecitas.

El consejo de la abuela Cañi: "Arrepentirse es de cobardes".

Envidia Kotxina - Daños Colaterales (YouTube)

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One Response to Las cruces de mayo

La Ardilla Voladora dijo...

Di que sí, nada de arrepentirse, que como dice mi abuela: "el río está lleno de peces".

Un beso.

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