Quiero hablar de tí. Que entiendas que todos los cuentos tienen un final feliz por muy dura que sea la historia que detrás dejamos. Siempre existe un "colorín colorado", siempre existe una sonrisa detrás de todo. Siempre reinvento un final para quién haga falta.
"Pese a vivir frente al mar, jamás se sintió libre como las olas. Nunca supo lo que era nadar en libertad. Desconocía la sensación de zambullirse en el agua con más abrigo que la piel y secarse a base de abrazos. Todo parecía estar hueco y razón, no dejaba de tener.
En su interior, ella sabía que no era una princesa normal y por ello, se atormentaba y albergaba un gran pesar que la acompañaba allí donde iba. No era feliz pero tampoco sabía cómo luchar. Al fin y al cabo, era una princesa.
Por orden de los Reyes, vivía encadenada en su habitación y pasaba las horas asomada a una ventana donde, día tras día, la brisa mecía sus tristes lágrimas por aquel príncipe que la robó el corazón.
Observaba como los barcos atracaban y esperaba su llegada pese a la orden de busca y captura que se conocía en todo el reino. El Rey quería su cabeza. Pero aquel príncipe, cegado por el amor e ignorando las amenazas se resistía a abandonar a su princesa.
Creía que la vida era eso, que había nacido para vivir en aquella urna de cristal como ordenaron los reyes antaño. Su destino había sido fijado de manera injusta por unos progenitores que no comprendieron la simpleza de la palabra amor.
La princesa jamás había probado el chocolate y desconocía el olor del azahar pero tampoco albergaba curiosidad alguna. Era un ser inerte frente a la vida que, tras la ventana, se veía transcurrir de manera tranquila y no siempre acompasada.
Tras 19 años, la esperanza se había marchado con la llegada del sol. Mientras que por las noches, inventaba un mundo y sonreía sin abrir los ojos. Soñaba con objetos y personas que no conocía. Sin nombres. Pero que la hacían viajar lejos y olvidar aquellas cuatro paredes de las que jamás podía escapar.
Mientras tanto, el ejército del Reino Gominola estudiaba aquellos parajes desconocidos. Sabía que la lucha tan sólo acababa de comenzar..."