17 miradas más, son igual a 8

Colocada frente al espejo de mi habitación, ensayo mi discurso para no caer en una mala improvisacion que me haga desesperar frente a un público tan exigente e ingenuo como el que tendré.

Y ahí estoy, mirandome como si el tiempo no se malgastase lo suficiente. "No me gusta ni mi cara ni mi nombre. Bueno, las dos cosas han acabado siendo la misma. Es como si me encontrara infeliz dentro de este nombre pero sospechara que la vida me arrojó a él, me hizo a él y ya no hay otro que pueda definirme como soy.
Digo Marta y estoy viendo la imagen que cada noche se refleja en en este espejo, mis gafas rayadas, los ojos pequeños y cansados, y toda esta historia contenida, porque la cara aún así, no me ha cambiado desde que era pequeña.

Pienso en mí, en lo que soy pero también en todas las cosas que podía haber sido. Ya se que no soy vieja, pero dime, cómo podria cambiar ahora de pronto, cómo se cambia, dime, cómo se da un vuelco al presente cuando te has ido enredando en algo que no querías".

Que hago oidos sordos al terminar mi ensayo para no escuchar la última palabra. Que no puedo oirla porque mi cuerpo se estremece y mis lágrimas brotan por las heridas que se abren sin más.

Porque no quiero oirlo.
Porque no quiero vivirlo.
Porque no aprendí a olvidar aún.
Porque te necesito sin más.
Porque quiero saber qué ves tú.

Tan sólo Una Palabra Tuya bastará para morir en la oscuridad de la que el sábado me rescataste, haciendo que mi corazón bombease de nuevo, que reviviese de todos estos desencuentros y olvidar el frío que Madrid comienza a proyectarme.

Que quiero un recuerdo inolvidable de tí, que me haga levantarme todos los días, para tachar una hoja nueva de calendario y disminuir la cuenta atrás para verte.

Escrito en . Guardar el enlace permanente. RSS feed para esta entrada.

Buscador

Swedish Greys diseñado por Nordic Themepark y modificado por Marta Cañizares para "La niña de las sombras".