Un antro sin igual

Tras llegar a clase tarde después de levantarme con ganas de cumplir con la URJC un martes 5 de mayo. Sentirme realizada por volver a casi "odiar" a princesita Flamingo por su conducta adolescente pero entrañable. Me dispongo a relatar un día que bien podría ser un chiste, broma o programa de cámara oculta.

La clase de Documentación Informativa fueron exposiciones de no más de cuatro minutos y esto se asemejaba más al típico mercadillo donde los vendedores, con gran experiencia, atraen a las masas con frases contundentes y de un caché inclasificable. "¡Tres bragas por dos euros, reina!", "aquí barato que tengo rebajas todo el año", etc ...

El público, por decisión del profesor, aplaudía para cortar por lo sano a los pobres vendedores, en este caso compañeros de clase que humildemente exponían y así, pasar al siguiente puesto para ver que nos vendían. Mucho arte todo.

Por otro lado, Introducción al Periodismo Audiovisual no tuvo demasiado que envidiar. El profesor, directamente, vino a hablar de su libro. Así de fácil, es decir, no tuve ni que sacar un bolígrafo porque casi durante dos horas, este profesor se convirtió en Paco Umbral ante la mirada atónita de unos cuántos que aguantábamos como podíamos.

De todos modos, este cuadro ya se veía venir cuando el último día ya se dedicó a contarnos su vida, obra y milagros por Antena 3 y demás cadenas. Las cuales hay que destacar que serán una utopía en nuestra trayectoria profesional debido a la formación que muchos profesores intentan darnos. Pero eso sí, en mi currículum yo pondré en la categoría de Otras actividades, "Licenciatura en Periodismo".

La Rey Juan Carlos I, en sí, parece buena universidad. Mucho nombre y es que el campus fuenlabreño es por todos bien conocido como "Gay Juan Carlos". Debo decir que nada tiene que envidiar a los antros que visito. La excepción, es que aquí se les llena la boca diciendo que venimos a formarnos y estudiar.

Escrito en . Guardar el enlace permanente. RSS feed para esta entrada.

Buscador

Swedish Greys diseñado por Nordic Themepark y modificado por Marta Cañizares para "La niña de las sombras".